Morningstar España
Kunal Kapoor, 2005-03-18
Uno de los días más esperados por los inversores es cuando Berkshire Hathaway, el holding de Warren Buffet, remite su carta anual a sus partícipes.
En efecto, hay mucho que los inversores pueden aprender de lo que dice Warren Buffet. Y este año no es distinto. La última carta de Buffet (pinche aquí para leerla en su totalidad) está repleta de interesantes anécdotas y lecciones muy valiosas para los partícipes de fondos. A continuación figuran unas cuantas que he extraído de la carta de este año.
Atenerse a lo básico
Ningún inversor tendrá éxito sin una cierta disciplina, y, como bien apunta Warren Buffet, la mayoría no consigue batir a los índices precisamente porque no tiene disciplina. A su juicio, un buen punto de partida (una idea que siempre hemos compartido) es un compromiso a largo plazo por un enfoque de bajo coste.Para que este enfoque sea efectivo, conviene evitar invertir basándose en soplos o sentimientos (como, por ejemplo, comprar valores después de hayan subido mucho o venderlos después de hayan bajado mucho). Además, limitar los costes, y en particular las comisiones de gestión o los gastos de transacción, es un factor importante para sacar lo mejor de los grandes índices del mercado.
Simplicidad
Lo cierto es que invertir no es tan complicado como muchos podrían pensar. Si la cuestión se vuelve compleja, en muchas ocasiones, es porque los inversores pretenden obtener rentabilidades demasiado elevadas invirtiendo en productos que no entienden. Como dice Buffet: “Mantenga unas propuestas simples”. En otras palabras, construya una cartera con la que usted se sienta cómodo e invierta en activos que no le quiten el sueño.
Evite el ruido
Si presta demasiada atención a las noticias financieras, existe el riesgo de que decida actuar, incluso si la mejor alternativa es no hacer nada. En este aspecto, uno puede aprender de la experiencia de Buffet. En Berkshire Hathaway, por ejemplo, el periodo medio de mantenimiento de valores como American Express, Coca-Cola, Gillette y Wells Fargo supera los 12 años.Por eso, si usted no tiene la certeza de poder mantener una inversión durante un plazo largo de tiempo, lo mejor es que no la compre. Y si se decide por invertir, no lo haga simplemente por lo que oye o lee en los medios de comunicación. Al contrario, resise sus hipótesis, compruebe si sigue siendo válida y actúe únicamente si algo ha alterado su idea original.
El valor de la diversificación
A lo largo de los años, Buffet siempre se ha mostrado crítico respecto a aquellos que diversifican sus inversiones sin ton ni son. El argumento es que si uno diversifica sin discriminación, llega un momento en que la cartera se aproxima mucho al índice de referencia. Sin embargo, como demuestra Warren Buffet en su última carta, diversificar de una forma adecuado añade valor.En particular, su visión negativa sobre el dólar recuerda a los inversores americanos, cuyas carteras de inversión están muy expuestas al billete verde, que no es mala idea dedicar parte del patrimonio a activos denominados en divisas extranjeras. Nadie sabe si Buffet estará en lo cierto o no, pero podría estarlo, entonces, ¿por qué no dedicar una parte de su cartera fuera de la zona dólar?
Los incentivos importan
Una parte interesante de la carta de este año se centra en los incentivos que existen en NICO, una de las empresas participadas por Berkshire. No voy a entrar en detalles, pero Buffet se compromete a que ningún empleado de la compañía será despedido únicamente por no haber cumplido el volumen de negocio establecido.¿Qué tiene que ver esto con el mundo de los fondos? Hay que saber que la estructura de las compensaciones o incentivos determinan en gran medida la forma en que los fondos de inversión se distribuyen a los inversores. Cuando la atención se centra exclusivamente en las ventas y en el aumento del volumen gestionado, existe el riesgo de que los inversores reciban un mal servicio. Es mejor invertir en una gestora que está más interesada en explicar su filosofía de inversión (y mantener la inversión incluso en los peores momentos) que no en una que se limita a pregonar las rentabilidades obtenidas.
Independencia: más allá de las etiquetas
Volviendo a unos de sus temas favoritos, Buffet insiste mucho en que el que un miembro del consejo de administración de una compañía tenga la etiqueta de “independiente” no significa, ni mucho menos, que sus intereses coincidan con los de los accionistas. Estos consejeros independientes no tienen ningún incentivo en tirar piedras sobre su propio tejado ya que suelen recibir importantes gratificaciones de la compañía que vigilan.En realidad, la única forma de juzgar el trabajo del consejo de administración es a través de sus actuaciones. En el mundo de los fondos de inversión, esto significa que a pesar de que haya cada vez más personas independientes al frente de las gestoras, el éxito de estas iniciativas no puede medirse hasta evaluar si realmente han cambiado las formas de actuar.
Kunal Kapoor, 2005-03-18
Uno de los días más esperados por los inversores es cuando Berkshire Hathaway, el holding de Warren Buffet, remite su carta anual a sus partícipes.
En efecto, hay mucho que los inversores pueden aprender de lo que dice Warren Buffet. Y este año no es distinto. La última carta de Buffet (pinche aquí para leerla en su totalidad) está repleta de interesantes anécdotas y lecciones muy valiosas para los partícipes de fondos. A continuación figuran unas cuantas que he extraído de la carta de este año.
Atenerse a lo básico
Ningún inversor tendrá éxito sin una cierta disciplina, y, como bien apunta Warren Buffet, la mayoría no consigue batir a los índices precisamente porque no tiene disciplina. A su juicio, un buen punto de partida (una idea que siempre hemos compartido) es un compromiso a largo plazo por un enfoque de bajo coste.Para que este enfoque sea efectivo, conviene evitar invertir basándose en soplos o sentimientos (como, por ejemplo, comprar valores después de hayan subido mucho o venderlos después de hayan bajado mucho). Además, limitar los costes, y en particular las comisiones de gestión o los gastos de transacción, es un factor importante para sacar lo mejor de los grandes índices del mercado.
Simplicidad
Lo cierto es que invertir no es tan complicado como muchos podrían pensar. Si la cuestión se vuelve compleja, en muchas ocasiones, es porque los inversores pretenden obtener rentabilidades demasiado elevadas invirtiendo en productos que no entienden. Como dice Buffet: “Mantenga unas propuestas simples”. En otras palabras, construya una cartera con la que usted se sienta cómodo e invierta en activos que no le quiten el sueño.
Evite el ruido
Si presta demasiada atención a las noticias financieras, existe el riesgo de que decida actuar, incluso si la mejor alternativa es no hacer nada. En este aspecto, uno puede aprender de la experiencia de Buffet. En Berkshire Hathaway, por ejemplo, el periodo medio de mantenimiento de valores como American Express, Coca-Cola, Gillette y Wells Fargo supera los 12 años.Por eso, si usted no tiene la certeza de poder mantener una inversión durante un plazo largo de tiempo, lo mejor es que no la compre. Y si se decide por invertir, no lo haga simplemente por lo que oye o lee en los medios de comunicación. Al contrario, resise sus hipótesis, compruebe si sigue siendo válida y actúe únicamente si algo ha alterado su idea original.
El valor de la diversificación
A lo largo de los años, Buffet siempre se ha mostrado crítico respecto a aquellos que diversifican sus inversiones sin ton ni son. El argumento es que si uno diversifica sin discriminación, llega un momento en que la cartera se aproxima mucho al índice de referencia. Sin embargo, como demuestra Warren Buffet en su última carta, diversificar de una forma adecuado añade valor.En particular, su visión negativa sobre el dólar recuerda a los inversores americanos, cuyas carteras de inversión están muy expuestas al billete verde, que no es mala idea dedicar parte del patrimonio a activos denominados en divisas extranjeras. Nadie sabe si Buffet estará en lo cierto o no, pero podría estarlo, entonces, ¿por qué no dedicar una parte de su cartera fuera de la zona dólar?
Los incentivos importan
Una parte interesante de la carta de este año se centra en los incentivos que existen en NICO, una de las empresas participadas por Berkshire. No voy a entrar en detalles, pero Buffet se compromete a que ningún empleado de la compañía será despedido únicamente por no haber cumplido el volumen de negocio establecido.¿Qué tiene que ver esto con el mundo de los fondos? Hay que saber que la estructura de las compensaciones o incentivos determinan en gran medida la forma en que los fondos de inversión se distribuyen a los inversores. Cuando la atención se centra exclusivamente en las ventas y en el aumento del volumen gestionado, existe el riesgo de que los inversores reciban un mal servicio. Es mejor invertir en una gestora que está más interesada en explicar su filosofía de inversión (y mantener la inversión incluso en los peores momentos) que no en una que se limita a pregonar las rentabilidades obtenidas.
Independencia: más allá de las etiquetas
Volviendo a unos de sus temas favoritos, Buffet insiste mucho en que el que un miembro del consejo de administración de una compañía tenga la etiqueta de “independiente” no significa, ni mucho menos, que sus intereses coincidan con los de los accionistas. Estos consejeros independientes no tienen ningún incentivo en tirar piedras sobre su propio tejado ya que suelen recibir importantes gratificaciones de la compañía que vigilan.En realidad, la única forma de juzgar el trabajo del consejo de administración es a través de sus actuaciones. En el mundo de los fondos de inversión, esto significa que a pesar de que haya cada vez más personas independientes al frente de las gestoras, el éxito de estas iniciativas no puede medirse hasta evaluar si realmente han cambiado las formas de actuar.
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